Hoy es el día que salimos de cuentas. Parece mentira que hayan pasado ya 9
meses de embarazo. Pero a la vez, miramos atrás en el tiempo y nos parece que
hace mil años desde que el predictor dijo “sí”.
Parece lejano el día que hicimos nuestra primera visita a la doctora para
comunicarle nuestra intención de procrear, por si había algo que teníamos que
saber aparte de lo básico, como el ya conocido ácido fólico o alguna cosa más.
Aquel día, ilusionados y un poco ignorantes del tinglado en que nos metíamos,
nos fuimos a comer al restaurante Robert que se encuentra en el Museo de Arte y Diseño de Nueva York. Con ventanales del techo al suelo, las vistas de Colón (Columbus), Broadway, Central Park West y
Central Park son inmejorables. Hoy, para cerrar el círculo, hemos celebrado nuestra
salida de cuentas haciendo brunch en
el mismo sitio.
Nos hemos puesto guapos (o lo hemos intentado) y después de alimentarnos
con esmero, hemos aprovechado para darnos un paseo por el parque en un día que
ha resultado bastante gris, pero no por eso menos alegre.
El viaje acaba como empezó: con ilusión y buenas perspectivas. Hasta el momento
todo ha ido muy bien y así esperamos que siga. Echaremos de menos a ese
bichillo (Boliche) que se mueve y se comunica con nosotros a través de varias
capas de músculo y grasa y daremos la bienvenida a un pequeño ser que cuya
llegada es inminente.
Pronto tendréis noticias nuestras.
¡Que nervios!